Rocío Carrasco esconde una macabra realidad tras la herencia de su madre. Sus hermanos nunca podrán conseguirlo.

 Con el correr de los años ha quedado demostrado que Rocío Carrasco no teme a nada ni nadie. Ya hizo públicas sus etapas más oscuras y las facetas desconocidas de sus familiares. De lo que habla poco es de la verdadera relación que tuvo con su madre, Rocío Jurado, con quien compartió más tiempo que cualquiera de sus hermanos.

Por más de veinte años, la madre de Rocío Flores se llamó al silencio, llevando una vida lo más discreta posible. Sin embargo, un día no aguantó más y con sus dos documentales, que se vieron a través de Telencinco, dejó al descubierto historias de muchos de los familiares de su madre que no coinciden con la realidad vivida por ella.

Sus confesiones le costaron a Rociito ser una de las vetadas de Mediaset, lo que, si bien la alejó de los principales programas de televisión, no le impidió seguir con su deseo de confesar lo que otros no quieren o deben decir. Ahora, estuvo en el programa Luar para promocionar los espectáculos en honor a Rocío Jurado, que serán llevados a cabo en mayo en Galicia junto a Anabel Dueñas.

En ese marco, Rocío Carrasco no perdió la oportunidad de dejar al descubierto la mayor herencia que le dejó la cantante. La ex de Antonio David Flores hizo su regreso a la televisión con un atuendo que dio mucho para hablar: eligió una vestimenta negra con la que expuso que por más que la relación con su madre fue cambiando, siempre la lleva con ella.